Fuente: Excélsior
E1 proyecto fue desarrollado por GFM en sociedad con minera Autlán y utilizará energía limpia.
Puebla. La empresa GFM, de José Antonio Rivero Larrea, y Compañía minera Autlán, inaugurarán hoy su Central Hidroeléctrica Atexcaco, en los municipios de Teziutlán y Hueyapan, estado de Puebla, en la cual invirtieron mil 200 millones de pesos.
Rodolfo Avendaño Martínez, director del proyecto, explicó que esta planta es producto de una coinversión entre la firma GFM, que tiene el 51 por ciento de las acciones, y compañía minera Autlán, que canalizó 49 por ciento del capital.
Para el desarrollo del proyecto, el cual será administrado por GFM Energía, también contaron con un importante monto de crédito de una institución financiera extranjera, añadió.
Expuso que esta planta venderá su electricidad a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) bajo el esquema de productores independientes, mediante un contrato que firmaron con la paraestatal, el cual consiste en que las empresas privadas le entregan la electricidad producida en la hidroeléctrica de Puebla a la CFE, y ésta se las compensará para el consumo de sus instalaciones de Gómez Palacio, Durango; Teziutlán, Puebla, y Tamos, Veracruz.
Estimó que bajo este esquema minera Autlán logrará ahorros de un 20 por ciento en sus costos de electricidad.
Inauguración La planta que será inaugurada hoy por el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, y el secretario del Trabajo, Javier Lozano, en representación del presidente Felipe Calderón, tendrá una capacidad de producción de energía eléctrica de 211 gigawatts/ hora por año.
La hidroeléctrica ya está lista al 100 por ciento y su operación será con energía limpia, lo que significa que se dejarán de emitir al ambiente 97 mil toneladas al año de CO2; si se compara con la contaminación que genera una planta de combustóleo, explicó Avendaño. Esto equivale también a sacar de circulación 19 mil vehículos.
Durante la construcción de la hidroeléctrica se generaron alrededor de 600 empleos directos, y actualmente requiere de unas 15 personas para su operación, pero debido a su tecnología avanzada, con el tiempo sólo necesitará de seis personas para su operación y mantenimiento, ya que muchos de los equipos serán controlados por computadora de forma remota.
La planta, que tiene sus oficinas generales en el poblado de Aire Libre en Puebla, requirió para el desarrollo del proyecto de una excavación de nueve mil metros de túneles para la conducción del agua hacia los turbinas y generadores.
Se instalaron más de mil 600 metros de tubería de presión, incluyendo 380 metros de tubería vertical.
También se usaron tres kilómetros de línea eléctrica que conducen la energía generada a una subestación operada por transformadores.
Expuso que esta planta es un proyecto ecológico al filo del agua con un factor de abasto superior al 81 por ciento.
Esto significa que a lo largo del año el agua que llegará ala hidroeléctrica tendrá un abasto de 81 por ciento, cifra muy superior a la de hidroeléctricas más grandes, que tienen una afluencia de agua de entre 12 y 16 por ciento.
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